En honor a Freud

Ayer, 23 de septiembre, se reivindicó el orgullo bisexual en la Conferencia Mundial de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales. El mismo día, pero de 1939 murió Sigmund Freud.

Estos datos no son mera coincidencia. El "Padre del Psicoanálisis" no solamente se volvió un referente dentro de la psicología e instauró el debate sobre el Complejo de Edipo y la sexualidad infantil, sino que también fue el primero en estudiar la bisexualidad humana. En su nombre se eligió la fecha.

El concepto de bisexualidad fue una de las ideas fundamentales que enfatizó en sus Tres ensayos de teoría sexual (1905). El impulso sexual en la teoría freudiana, no era específico en su origen, pero ha tenido la particularidad de diferenciar a lo psíquico de lo biológico. Fuera del campo psicoanalítico, los investigadores ignoraron al autor y su teoría, para continuar con la búsqueda hormonal.

Tanto en el primero, como en el segundo ensayo, Freud establece que el ser humano posee una disposición bisexual más allá de lo anatómico, apartada de lo físico, con múltiples posibilidades de placer representadas en la pulsión sexual. La sexualidad es deseo, de ahí que resulte eminentemente humana. El objeto de amor no tiene nada que ver con sus sexos, sino con la fuerza que en él se percibe.

En su honor, entonces, justo a 70 años de su muerte, se celebró en Johannesburgo la reivindicación del orgullo bisexual en la Conferencia Mundial de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales.