Las cosas por su nombre

Más de 1.500 términos y expresiones relacionadas con la terminología y el argot de la comunidad dan formato a un diccionario útil e interesante, que llena un vacío lexicográfico y que toca una de las parcelas idiomáticas más dinámicas de nuestra lengua actual.


Los diccionarios son hijos de su tiempo, y por tanto reflejan muy bien los valores predominantes en la sociedad de cualquier época, y en ese contexto hay que entender sus contenidos y la variación que sufren al compás de los vientos que soplan”, sostiene el filólogo Félix Rodríguez, autor del diccionario gay-lésbico más extenso sobre la materia.


El material, publicado por la Editorial Gredos, avanza en un campo inexplorado por los especialistas, al proponer un notable registro del vocabulario y una minuciosa investigación de su historia.


Rodríguez cuenta la evolución, no sólo del lenguaje, sino el posicionamiento que tanto lesbianas como gays fueron logrando ganar: “Hoy, donde la homosexualidad es más visible, hay voces que se han propagado rápidamente en el habla, como bollera (lesbiana) y camionera (lesbiana con rasgos viriles), al lado de otras que, pese a ser creaciones humorísticas se resisten a salir de su marco regional”.

Comentarios

Entradas populares